Hecho por Studio Anatole
Se ha demostrado que el monstruo del armario existe. Si no estuviera ahí, el niño sería un buen chico y no haría ninguna tontería. Así que ha decidido ocuparse él solo de este voluminoso amigo, como un adulto. Pero enseñar a un monstruo a lavarse los dientes, a peinarse el pelo selvático, a no tocar los enchufes o a decir palabrotas es un trabajo duro. Simplemente, el niño ya no tiene tiempo ni de escuchar a sus padres... Estos divertidísimos sketches combinan la vida cotidiana con la desbordante imaginación de los niños.
Disponible en Bookinou
Grabación de voz
Mezclando
Diseño de sonido